Resumen: |
En este libro, dividido en cuatro estaciones –Invierno, Primavera, Verano, Otoño–, Solano da cuenta de sus trabajos y sus días en Corea a lo largo de todo un año, y registra su vida en un mundo que está en las antípodas de su lugar de origen. Con una mirada que nunca pierde la elegancia, a veces con la actitud de un plácido flâneur, otras con la de un hombre desasosegado, habla aquí de su insólito trabajo como locutor en una radio coreana, de las infinitas y extrañísimas clasificaciones que tiene el sexo pago en aquel país, de los avatares de la relación de pareja, de los amigos y la familia que quedaron en Colombia y que se desdibujan de a poco, hasta construir un mural fascinante y magnético que se lee como un diario de vida y, también, como una crónica desde el centro mismo de un país tan lejano como desconocido. |